El Alcoholismo y su Prevención

Nada más certero que la frase que dice “más vale prevenir que lamentar” y en el caso del alcoholismo no es la excepción. Está enfermedad genera para las sociedad y las familias un verdadero problema que afecta ámbitos como el familiar, social, económico y de salud, ningún ser humano está exento de padecer este mal por lo que todos debemos estar alertas y llevar a cabo acciones enfocadas a la reducción del uso nocivo de alcohol, entre las cuales destaca el asistir a pláticas de prevención en centros de rehabilitación en edades tempranas, pues son los adolescentes los grupos más vulnerables.

Pero como todo buen hábito se aprende en casa dentro del núcleo familiar es donde se dan la principales acciones de prevención, como bien se sabe la comunicación es la base en las relaciones humanas y es con ella que podemos informar, en primer instancia que el alcohol es una droga y como tal es adictiva, se comienza con pocas cantidades y después se necesita aumentar para conseguir los efectos placenteros, además de causar serios problemas a la salud y afectar el correcto desarrollo propio de la adolescencia y juventud. Sin embargo el ejemplo debe ser la acción prioritaria que todo padre de familia o adulto debe procurar para alejar a los hijos de este vicio, si este no es el caso acuda a una clínica de rehabilitación para alcoholicos donde podrán orientarlo para la prevención y tratamiento del alcoholismo.

Aunado a la familia está el ámbito escolar donde el personal docente habrá de reforzar las acciones de prevención y estar alerta a señales que pudieran presentar los alumnos, así como reincorporar aquellos alumnos que habiendo padecido este mal estén en tratamientos o dados de alta de centros de rehabilitación con la finalidad de evitar una recaída. Personal administrativo deberá reforzar la vigilancia para alejar personas que maliciosamente traten de inducir al alumnado a probar bebidas embriagantes.

La sociedad juega un papel estelar si de prevención se trata, en ella es donde convergen las presiones al consumo tanto para adultos como para adolescentes y jóvenes. Pero es dentro de la sociedad donde se deben realizar acciones en conjunto para reducir los porcentajes de adicciones al alcohol, como puede ser: por parte de los gobiernos Acciones aumentar campañas de prevención, como sociedad erradicar ideas como darles su primer trago a nuestros hijos, aumentar el autoestima entre los diferentes integrantes de la familia para tener seguridad y mantener el control bajo presión.